Este es un disco de madurez. No se llega a una producción como esta si antes no se ha recorrido un largo trayecto. Guaco nos ha regalado muchos discos magistrales: varias generaciones de melómanos y bailadores dan fervoroso testimonio de eso. Pero éste, Escultura, fácil puede colocarse entre los mejores de todos los tiempos guaqueros. Después de varias décadas cultivando un estilo único e irrepetible, Guaco no ha dejado de cautivar legiones de fanáticos en todo nuestro continente. Y en Escultura eso se evidencia. Vuelve uno de los primeros entusiastas de este sonido, Gilberto Santa Rosa, con “La cremita” (quizá mi tema favorito en un repertorio sin desperdicio). Con él, otro consecuente seguidor, el nicaragüense Luis Enrique, interpretando “Tan solo un beso tuyo”, del joven cantautor venezolano Julio César Rodríguez. Y el debut con la Superbanda del panameño Rubén Blades, quien se luce con “Por esa forma”, donde el inteligente arreglo nos lleva a un sabroso viaje, en los coros y los soneos, por algunos de sus viejos éxitos. Para cualquier viejo melómano, amante del bolero cubano, el nombre de Lena Burke le tiene que hacer un guiño curioso. Demasiado parecido al de la que, en efecto, es su madre: la gran Malena Burke. Pero Lena se va por un derrotero distinto. “Tan fácil” es una buena muestra de su versatilidad. Cierra este festín de invitados internacionales el colombiano Andrés Cepeda, con “Quisiera que pudieras”. La gran mayoría de estos temas corresponde al talento creativo del compositor caraqueño José Alfonso Quiñones –el mismo de “la Turbulencia” o “Ella”, el éxito de uno de los últimos discos de Santa Rosa–, quien prácticamente se echa sobre los hombros Escultura. Entre los pocos temas que no son de su autoría está “Déjate llevar”, compuesto a cuatro manos por Miguel Ignacio Mendoza (Nacho) y el talentoso Daniel Varón. Éste, por supuesto, lo interpretan los muy exitosos Chino y Nacho. Y también hay que destacar la presencia de Jorge Luis Chacín, el viejo y emblemático integrante de Guaco, ahora en plan de solista, pero siempre muy vinculado al grupo. Mención especial para Claudia Santos, una bella joven de voz potente y cálida con un promisorio horizonte por delante. Ella canta “Dámelo todo”. Finalmente, las voces Guaco: Luis Fernando y Ronald Borjas, los primos cabimeros, con ya más de una década de éxitos con la Superbanda. A Luis Fernando le tocan los muy pegajosos “Quiéreme así” y “A plena vista”, la que abre fuegos en esta colección; y a Ronald “Cada vez” y “Vivo”, la que cierra bien en alto, con mucha alegría y ritmo, el repertorio. Todos los arreglos son de Juan Carlos Salas Polanco, trompetista y director musical de la banda, con ya casi treinta años de permanencia en la misma. Y, por si fuera poco, además fue el ingeniero de grabación y mezcla de todo el disco. La producción y el concepto general, obviamente, del Guaco Mayor, quien con su presencia y su voz representa y simboliza todo lo que ha sido esta excepcional agrupación en nuestra música popular continental: Gustavo Aguado. Escultura es la producción número 40 en la larga discografía de Guaco, y creo no exagerar si digo que es el disco más ambicioso hasta ahora. Poco más de un año se llevó su producción. Nada quedó al azar, no hubo un detalle demás, tampoco de menos. Ya lo dije: es un disco de madurez. Un producto único, de colección. César Miguel Rondón 09/12