Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación: todo estaba ya escrito en tu libro;todos mis días se estaban diseñando,aunque no existía uno solo de ellos. Sal. 139:16 (NVI) Es lindo saber que Dios desde siempre ha tenido un plan para nosotros, nuestra vida ha sido diseñada para cumplir ciertas funciones que se nos han encomendado. Algunos, han sido llamados para servir en la alabanza, otros en la oración, otros en la evangelización y en diferentes proyectos que llevan a un solo fin: Predicar el Evangelio de JC. Muchas veces pensamos que nosotros no servimos para nada, pero esto sucede cuando no hemos encontrado nuestro propósito. Aveces tratamos de creer que nuestro propósito es lo que nos gusta más, pero no nos hemos puesto a pensar que nuestro verdadero propósito es el que Dios ya nos designo. Puede ser que nuestro propósito no sea ser un salmista, sino quien abre las puertas de la iglesia, o quizá quien tiene que evangelizar. No importa cual sea nuestro propósito, lo que importa es llevarlo acabo y cumplir con exactitud lo que Jesucristo declaro antes de partir: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura". Y declarado esto, también hizo una promesa a sus discípulos: Que un día regresaría por su pueblo, y para esto solo depende de nosotros estar preparados para reunirnos con el en #SuRegreso a la Tierra.