El pianista y compositor Daniel Lozano presenta su primer disco “La escalera del tiempo”, trabajo que agrupa ocho temas muy heterogéneos, lo que da muestra de su talento como compositor. Tras realizar los estudios de composición, piano y solfeo en el Conservatorio Superior de Música y ligado al mundo musical de Málaga desde su juventud, ha desarrollado su labor como artista en grupos como Jesús Vandalia, Mamakin, El Trío del Saco, Raimundo Amador y Danza Invisible. Actualmente forma parte del grupo Jarrillo Lata y es pianista de Javier Ojeda. Ahora, se atreve con este trabajo lleno de interiorismo y diversidad. Para ello, reúne a veintiún músicos de trayectoria contrastada (Javier Ojeda, Celia Flores, Coki Giménez, Agustín Carrillo y Enrique Oliver, entre otros); siendo grabado, mezclado y masterizado en los estudios Puerto Records de Málaga por el ingeniero y productor Manolo Toro. “La escalera del tiempo”, el título genérico, señala por sí mismo ese viaje interior que, Daniel, como compositor en todas sus dimensiones, realiza teniendo como médium el espejismo de la longitud del tiempo vivido. Porque sólo existe el presente. Y él sube y baja por la escalera de la memoria emocional que atesora en una infancia ligada al entorno rural de la Axarquía malagueña, “Salto del Negro”, su verdadera patria, desde la que levanta un mapa musical realmente heterogéneo, extraño, entraño y apasionado. Con ese patrimonio personal se muestra en su primer trabajo como un virtuoso e ilustrado creador, que decide revelar una geografía musical realmente excepcional por su biodiversidad. Del tema instrumental de “Leo”, la fuerza motriz e inspiradora del disco, con aires de jazz y flamenco, a piezas más sinfónicas como “Será tú piel”, y otras en dónde la ligereza de la música disco, el pop y el funk es su protagonista. “Es un disco de composiciones donde intento emocionar, no impresionar. Prima la música, el texto y el contexto por encima de cualquier individualidad”, afirma el autor. Las letras, escritas en su mayoría por él en ese proceso de reencuentro consigo mismo, salvo dos poemas del libro “La longitud del amor”, de Antonio Viñas, y una canción en inglés de Ara Lee-Oria, sugieren una ecología personal ligada a un íntimo paisaje sentimental. La naturaleza, en su rescoldo del ayer, el fluir del agua, la nostalgia, la herida del amor --ya evanescente-- y un principiante erotismo son los hilos conductores que las trenzan. El videoclip de la canción “Qué fue de aquellos besos” es interpretado por Celia Flores con una exquisitez fuera de toda duda, y perfectamente entramado por el director y productor Fernando Pozo, refleja con exactitud todo lo expresado hasta ahora. A lo que hay que sumar el exquisito cuidado en el diseño del libreto realizado por el artista plástico Paco Aguilar. Producto de las conexiones poéticas ocultas que se establecen cuando el acto de la creación se lleva desde un estado de apertura y recepción, de generosidad y confianza. La propuesta creativa de Daniel Lozano nos acerca a un recorrido humano que no nos es ajeno, se trata de una experiencia vital que nos invita a compartir, interpretado desde un lenguaje arriesgado, contemporáneo y universal. MÚSICOS Daniel Lozano: Piano, teclados y voz Coki Giménez: Batería Manolo Toro: Percusión, palmas, programaciones y batería (producción) Jorge Muñoz: Contrabajo y dirección de cuerdas Manuel Sáez: Bajo Juan Tomás: Bajo Miguel Ángel Pérez: Guitarra flamenca Agustín Sánchez: Guitarra española, acústica y eléctrica Agustín Carrillo: Saxo soprano y flauta Enrique Oliver: Saxo tenor Eva Montiel: Voz y coros Javier Ojeda: Voz Rocío López “Boterita”: Voz Celia Flores: Voz Elena Garrido: Voz Ara Lee-Oria: Voz Angelita Delsors: Coros Natalia Hernantes: Violín I Fernando García: Violín II Manuel Moreno: Viola César Jiménez: Violonchelo